Las urgencias dentales siguen siendo muy elevadas en las clínicas dentales ya que, por diferentes motivos, los pacientes esperan a sentir algún tipo de dolor para visitar a su dentista de confianza.
Pero muchos problemas dentales no se manifiestan con dolor y de ahí que el paciente desconozca que los padece.
Síntomas o signos que nos alertan que algo sucede en nuestra boca:
1). Esmalte desgastado,
Este trastorno dental llamado Erosión Dental, consiste en el desgaste o pérdida del esmalte (capa superficial de los dientes) por ácidos que contienen determinados alimentos y bebidas y por el reflujo gástrico, provocado por los ácidos del estómago.
Es muy importante tener unos hábitos saludables de higiene y reducir la ingesta de alimentos y bebidas erosivas. Utilizar pastas y colutorios de bajo efecto abrasivo y de alto contenido de flúor para fortalecer el esmalte.
2). Inflamación, enrojecimiento y sangrado de las encías
Las encías presentan un color rosado cuando están sanas. Cuando las encías sangran, tienen un color rojizo, inflamadas y retraídas (cuando la encía se sube o baja dejando expuesta la raíz del diente) estamos en presencia de una enfermedad periodontal. Según los síntomas, la enfermedad periodontal presenta tres niveles, inicial llamada gingivitis, moderada llamada periodontitis leve o avanzada llamada periodontitis grave. La gingivitis y la periodontitis leve son reversibles pero la periodontitis grave conlleva serias consecuencias como la pérdida de piezas dentales.
La enfermedad periodontal se detiene, se controla, pero no se erradica totalmente, por ello las visitas periódicas de revisión y limpieza dental y correctos hábitos de higiene ayudan a mantener la salud de las encías evitando la acumulación de sarro en los dientes.
3). Dolor muscular y desgaste de los dientes
El bruxismo (rechinar o apretar involuntariamente los dientes) comienza mucho antes de la manifestación del dolor. Es una enfermedad muy silenciosa ya que comienza sin síntomas, el paciente no sabe que la padece y acude a su dentista cuando presenta dolor en la articulación al abrir y cerrar la boca, dolores de cabeza y hasta de cuello. El bruxismo no es reversible, esto quiere decir, que no se cura pero si se detiene y se controla. Presenta tres estadíos, bruxismo leve, bruxismo moderado y bruxismo avanzado o grave, que se tratarán de diferente forma.
En las formas leve y moderada del bruxismo el tratamiento más adecuado es la férula de descarga (es una férula rígida transparente) que se usa por las noches para controlar los movimientos involuntarios y evitar el desgaste de los dientes.
4). Caries
La primera manifestación de la presencia de caries en la cavidad bucal es la aparición de pequeñas manchas blancas en el esmalte. No se manifiesta con dolor y generalmente no la apreciamos a simple vista. Si una caries no es tratada en sus inicios forma una cavidad profunda que llega al nervio generando un dolor insoportable y que en muchos casos destruye gran cantidad de la estructura dental.
Las caries se forman por la acumulación de la placa bacteriana formada por las bacterias y los restos de alimentos no eliminados por un buen cepillado. Los ácidos de las bacterias que forman la placa bacteriana destruyen el esmalte de los dientes y favoreciendo la formación de las caries.
Correctas técnicas de higiene, buenos hábitos alimentarios, evitando alimentos ricos en azúcares, y revisiones periódicas al dentista, son las medidas más eficaces para evitar la aparición de caries.
Cuando una caries provoca dolor, es porque ha llegado al nervio y será necesario realizar una endodoncia (eliminar el nervio infectado por la caries) y posteriormente, según el tamaño de la caries se deberá hacer una reconstrucción de composite, una incrustación de porcelana o una corona de porcelana también.